martes, 21 de julio de 2015

OLVIDE OLVIDARTE : Capitulo 13 (leer abajo)

CAPITULO 13


Al día siguiente, sobre las cuatro de la tarde, Peter, con cara de
cansado apareció en el apartamento de Lali con una película
bajo el brazo, Family man, de Nicolas Cage, y un cubo de palomitas.
Al abrir la puerta y ver al joven allí, Estela se sorprendió
pero al percibir la sonrisa de su nieta, no lo dudó y se marchó
con rapidez a casa de su hija Samantha, con el pretexto de ver a
la pequeña Estela.
Peter, al ver marcharse a la mujer, miró a Lali y al darse
cuenta de que sonreía, no se lo pensó, soltó todo lo que tenía en
las manos, se acercó a ella y la atrajo hacia sí para besarla.
Primero lo hizo en la frente, luego en las mejillas y, finalmente,
en la boca. Durante un rato permanecieron abrazados en medio
del salón, hasta que Peter la cogió en brazos y la llevó hasta la
cama, donde continuaron besándose. Lali no quería pensar.
Sólo quería disfrutar del momento. Ansiaba los besos y las caricias
de Peter, como el sediento desea saciar su sed. Peter,
agotado por la noche pasada pero ansioso por retozar en los
brazos de Lali, se dejó guiar por ella, que le quitó primero la
camisa y luego le empezó a besar los pectorales hasta que él la
atrajo hacia sí y le susurró al oído:

Quiero que me desees tanto como yo a ti.

Al oír aquello, Lali se excitó aún más y mirándole con pasión
murmuró.

Te deseo. Te deseo, Peter.

Al oír aquello él sonrió y comenzó a besarla con tal pasión,
que Lali sintió que le hervía la sangre. Peter la apretó contra su
cuerpo y ella no dejó de besarle en el cuello. Las manos de él
comenzaron un lento ascenso bajo el pijama en busca de sus
pechos, hasta que los encontraron. Con delicadeza, el hombre
los acarició hasta que sus suaves dedos se centraron en sus
pezones. Lali notó que su cuerpo se aceleraba al sentir aquel
contacto, y se restregó contra su rígido miembro que, al sentir el
roce, se tensó a punto de explotar. Desesperado y muy excitado,
deseoso de entrar en ella, Peter la desnudó, mientras ella le
desabrochaba la cremallera del pantalón y le acariciaba el
miembro.

Peter, Peter —gritó con voz entrecortada al sentir la
húmeda y caliente boca de él succionando primero uno de sus
pezones y luego el otro.

Dime —susurró él mirándola con deseo.

Me estás volviendo loca…

Peter sonrió y, asiéndola por las nalgas, se apretó contra
ella para hacerla sentir la dureza de su deseo. Con voz entrecortada,
añadió:

Así me tienes tú a mí, preciosa.

¡Oh, Dios! —gimió ella echándose hacia atrás mientras se
apretaba más y más contra él. Aquel hombre sabía tocarla y
sabía hacerlo bien. ¡Muy bien!

Al sentir cómo su mano tocaba sin ningún pudor su erección
un gruñido de satisfacción surgió de la garganta de él. Con un
rápido movimiento, la tumbó en la cama, quedando él encima.
Sin apartar sus oscuros ojos de ella, Peter se quitó primero los
pantalones y luego los calzoncillos, consciente de que ella le
miraba y deseaba. Una vez desnudo, y con la respiración
entrecortada, se inclinó sobre ella y la besó. En ese momento,
lali sintió primero sobre su abdomen y luego sobre sus muslos
la dureza sedosa y caliente que deseaba sentir dentro de ella.
Pero Peter sacó la lengua y empezó a pasarla lentamente entre
sus pechos, para seguir bajando hasta su vientre.
Lali se estremecía de placer. Separó las piernas para permitirle
un acceso total. Cuando la lengua de Peter tocó con
ligereza los labios de su sexo, ella gimió gustosa. Como un lobo
hambriento, tomó con su cálida boca el clítoris de lali y jugó
con él hasta que ella aceleró sus movimientos y jadeó extasiada
de placer.
Abandonaba a sus caricias, Lali entrelazó sus dedos con el
pelo de él para alzarlo y, cuando lo tuvo frente a ella, le miró con
pasión y le besó. Le devoró la boca con tal morbo que éste pensó
que iba a explotar. Incapaz de aguantar un segundo más, Peter
se retiró y preguntó:

¿Tienes preservativos?

Lali, acalorada, negó con la cabeza. Llevaba tiempo sin preocuparse
de esas cosas. No tenía relaciones, así que no compraba
preservativos. Él, levantándose, cogió su cartera y tras
sacar uno, se lo puso con maestría y rapidez ante la mirada
obnubilada de ella.

Eres preciosa —le susurró al oído. Ella, rezongona, sonrió
al sentirle tan cerca.

Acoplándose de nuevo entre sus piernas, y sin necesidad de
guiar su erección, se hundió lentamente en ella, hasta que Lali
volvió a gemir contra su boca, mientras el seguía besándola.
Loco de deseo por la mujer que bajo él gemía y se retorcía bajo
su tacto, comenzó a moverse dentro y fuera de ella, con movimientos
cada vez más rápidos, más profundos, más certeros,
mientras Lali le clavaba las uñas en la espalda y jadeaba.
Cuando Peter oyó el grito de placer en ella, percibió que iba a
perder el control. Antes de soltar un sonido gutural y tumbarse
sobre ella, se hundió hasta el fondo en su cuerpo, y se dejó
llevar. Segundos después, Peter rodó hacia un lado de la cama y
la tomó entre sus brazos para acercarla hacia sí. Lali, consciente
de que había sido el mejor encuentro sexual de su vida, se dejó
abrazar y sonrió al oír.

¿Crees que un «crío» como yo podría volver a repetir lo
que hemos hecho?

Risueña, levantó la mirada y repuso:

Si el «crío» me promete que será igual, sí.

Peter, aún sin aliento, asintió y, acercando su boca a la de
ella, le susurró:

Te prometo que cada vez será mejor.

Se volvieron a besar con pasión. Minutos después, aún en
sus brazos, Lali se convencía de lo que había hecho e, incluso,
estaba deseosa por repetirlo. Consciente de lo que quería, le
miró, y no pudo contener la risa al ver a Peter dormido. Despacio
y con cuidado para no despertarle, se levantó de la cama y se
vistió. Peter debía de estar agotado. Seguro que llevaba más de
veinticuatro horas sin dormir.
Le miró con tranquilidad. Ante ella tenía a un hombre con
un cuerpo fibroso que, más que un doctor, ahora que tenía el
pelo suelto parecía un cantante de rock. Sin poder contenerse, le
besó en los carnosos labios y, con cuidado, le retiró el pelo de la
cara. Al ver lo sexy que estaba desnudo ante ella, suspiró. En ese
momento sonó el teléfono. Lo cogió de la mesilla con rapidez,
para que no se despertara, y salió cojeando de la habitación.

Cariño, ¿cómo va todo? —Era su abuela.

«Uff… si yo te contara», pensó divertida. En cambio
respondió:

Bien, bien, muy bien.

Escucha, cariño, estoy con Samantha y la niña en el
hospital.

Al oír la palabra hospital, Lali se asustó.

¿Qué ocurre?

No es nada grave, cielo —dijo para tranquilizarla—. La
pequeña lloraba mucho y nos acercamos con ella al médico.

Apoyándose en la pared preguntó, preocupada:

¿Qué os han dicho? ¿La niña está bien?

Tiene un poco de infección en la orina y se quedará
ingresada esta noche, en observación. —Con pesar, su abuela
añadió—: Yo te llamaba para preguntarte si te las podías apañar
sin mí esta noche. Me gustaría quedarme con Samantha.
Mañana, después de comer si todo va bien, Clarence me llevará
a tu casa. ¿Te parece?

Por supuesto, abuela. No te preocupes, ya has visto que
puedo arreglármelas sola.

Vaya, cariño, eso me deja más tranquila —sonrió la mujer.
Tras hablar con ella un rato, se despidió y colgó. Bajó el
timbre del teléfono y abrió la puerta de su habitación para
observar a Peter, que dormía con tranquilidad. El que su
abuela no regresara aquella noche le permitiría estar a sus
anchas, en su casa, con él. Con una sonrisa pícara, cerró la
puerta y, cojeando, se dirigió al salón. Allí, tras acomodarse en
el espacioso sillón, introdujo el DVD que éste había llevado, una
película de Nicolas Cage, y, tras coger las palomitas, se recostó
con una sonrisa. Disfrutó de la película mientras pensaba en
Peter y en lo que dirían Cande y el resto de sus amigas cuando

les contara lo sucedido

Continuará....
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CHICAS, COMO SABEN OLVIDE OLVIDARTE CUENTA LA HISTORIA DE LAS 5 CHICAS (LALI,CANDE,MERY,ROCHI Y EUGE) Y SE VAN INTERCAMBIANDO SUS HISTORIAS
ASI QUE EN LOS PROXIMOS CAPITULOS SE VA A RELATAR LA HISTORIA DE CANDE Y ASI SUCESIVAMENTE....
AUNQUE NO SON LALITER, SON MUY INTERESANTES, ASI QUE ESPERO QUE OS GUSTE
BESOS
Y MIL GRACIAS POR LEER 
@lalitter08

4 comentarios:

  1. Cuando vuelva la historia thiaguella vuelvo

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  2. La abuela los deja bien servidos siempre...el tiempito extra ,un plus para ellos

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  3. Bueno pero podrías poner un poquito laliter :)

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